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El papel es una de las invenciones más relevantes en la historia de la humanidad, ya que ha permitido recoger y conservar su historia. Desde su creación ha venido sufriendo grandes cambios asociados al desarrollo de nuevas tecnologías.
Actualmente, hay una gran diversidad de tipos de papel, que son útiles para distintos fines, como la impresión de documentos, decoración o embalaje. Esto va a depender de los tratamientos especiales que reciba, así como de su gramaje, grosor y otras propiedades.
Según estas características, el papel puede tener mayor afinidad a las tintas de impresión, ser más resistentes o flexibles. Si quieres conocer los tipos de papel más usados, aquí encontrarás una revisión completa de sus características.
¿De qué está hecho el papel?
El material base para hacer el papel es la pulpa de celulosa, la cual se obtiene principalmente de la madera. Hay algunos tipos de papel que se fabrican a partir de fibras de cáñamo, algodón o lino, pero son menos comunes.
Para obtener la pulpa de celulosa, se toman las fibras presenten en la madera de algunas especies de árboles, se muelen y mezclan con agua. Posteriormente, se le agregan algunos compuestos químicos para blanquearla y se lleva a secar para endurecer.
La lignina de la madera reacciona con la luz y hace que el papel se torne amarillento, por lo que se elimina agregando hidróxido de sodio o sulfuro sódico.
Los distintos tipos de maderas brindan distintas propiedades al papel, como la del pino que es de fibra larga. Con este, es posible obtener un material que tiene mayor resistencia y rigidez, mientras que otras de fibra corta, como la haya, brinda un acabado más fino.
Entre los componentes que se agregan a la celulosa, se encuentran el caolín (arcilla blanca), que brinda blancura y suavidad. Por su parte, el calcio ayuda a mantener las fibras de celulosa unidas y el talco contribuye a controlar el brillo, opacidad y hacer más blanco el material.
¿Qué es el gramaje y el grosor del papel?
El papel tiene distintas propiedades que debes tomar en cuenta al seleccionar el más adecuado para tus necesidades. Entre estos tenemos el brillo de la superficie de la hoja, la blancura o la opacidad (cantidad de luz que atraviesa la hoja).
No obstante, las características principales de referencia para elegir un papel determinado, son el gramaje y el grosor. Muchas personas los confunden y piensan que son lo mismo, pero tienen diferencias importantes:
Gramaje
Se refiere a la relación que existe entre la superficie y el peso del papel, la cual se mide en gramos/m2 o en gramos. Esta característica va a determinar tanto la consistencia como la transparencia de la hoja de papel, por lo que define en gran parte su resistencia.
Los papeles muy finos, como el de seda tienen gramajes que van de los 12 a 25 gr/m2. Por su parte, una hoja de papel blanco para imprimir suele tener un gramaje entre 80 a 90 gr/m2 y una cartulina fuerte de embalaje puede superar los 350 gr/m2.
Grosor
Indica el espesor que tiene una hoja de papel, generalmente medido en micras y tiene que ver con la densidad del material. Por lo general, mientras más grueso es un papel, tendrá un mayor gramaje, pero no necesariamente materiales de igual gramaje, tendrán igual grosor.
Esta propiedad viene determinada por los materiales usados en la fabricación del papel, así como en la cantidad de aire que se deposita entre las capas de celulosa. El grosor también se expresa como espesor y se calcula, por ejemplo, midiendo 100 hojas exactamente iguales y dividiendo el resultado entre 100.
Tipos de papel blanco
Este es el papel más buscado tanto para impresión de documentos como de imágenes, debido a que es un fondo neutro. La blancura de este material viene determinada por los aditivos químicos o cargas que se agregan durante su fabricación.
Los papeles blancos pueden tener distintas características, según los tratamientos especiales que hayan recibido durante su fabricación. En su mayoría, se trata de papel estucado (con aditivos que agregan brillo y suavidad a la superficie), con diversas presentaciones:
- Satinado: este se caracteriza por ser muy liso y suave al tacto, además de presentar una superficie brillante. Para esto, se le aplican recubrimientos que lo hacen mucho más resistente y duradero, siendo muy utilizado para impresiones de alta calidad.
- Mate: tiene un recubrimiento especial que evita que la luz refleje sobre la superficie, dando una apariencia más suave. Es usado principalmente para la impresión de fotografías, ya que no interfiere en las propiedades originales de la imagen.
- Reciclado: se obtiene a partir de un alto porcentaje (60 a 100%) de papel usado que es macerado para tener una nueva pulpa. Debe someterse a la acción de blanqueadores, para lograr una blancura adecuada y no suele ser estucado.
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Tipos de papel para imprimir
Al momento de imprimir documentos o imágenes, hay que tomar en cuenta tanto el gramaje como la opacidad y porosidad del papel. Esto va a determinar la forma en que absorben la tinta, siendo los tipos más comunes:
- Offset: no tiene revestimiento, por lo que su porosidad es bastante alta y absorbe muy bien la tinta, para un secado rápido. No refleja la luz y está disponible en gran diversidad de gramajes, por lo que es el más usado en trabajos de impresión.
- Couché: corresponde al estucado, por lo que puede tener la superficie mate o brillante, según el tratamiento de fabricación. Suele tener una porosidad baja, por lo que el secado de la tinta es lento, pero brinda una buena calidad de impresión.
- Ecológico: es aquel que se fabrica a partir de materiales provenientes de bosques con certificación FSC o 100% reciclados. Además, no contiene aditivos químicos ni revestimientos y suele tener una alta porosidad.
Tipos de papel para manualidades
- Crepé o pinocho: es de bajo gramaje, muy poroso y rugoso, el cual se presenta en distintos colores. Es muy maleable y resistente, por lo que se usa en la elaboración de disfraces, piñatas y muchas otras manualidades.
- Seda: tiene un gramaje muy bajo, con una textura muy suave y absorbente, el cual presenta una superficie con pequeñas arrugas. Se utiliza en fabricación de pompones y guirnaldas, entre otros usos, por su ligereza.
- Celofán: es un material plástico, también elaborado a partir de la celulosa, que es muy transparente. El mismo es muy flexible y resistente, con una superficie brillante, disponible en gran diversidad de colores.
- Kraft: es un papel bastante grueso, al cual no se le agregan blanqueadores y tiene tonos marrones. Es resistente al desgarro y la tracción, siendo utilizado en la elaboración de bolsas o empaques.
Tipos de papel adhesivo
Este es un papel que lleva en una de sus caras una capa de pegamento, que permite adherirlo a cualquier superficie. Ha sido diseñado para permitir la impresión por la cara libre del adhesivo, que puede ser estucada (couché), tipo offset (sin estucado) o con tratamientos especiales.
Según las características del adhesivo que presenta el papel, se pueden clasificar en:
- Permanentes: el pegamento se adhiere bastante bien a diversas superficies sin características técnicas particulares. Pueden ser transparentes u opacos y tienen larga duración.
- Súper permanentes: cuentan con un adhesivo capaz de sujetarse a superficies con condiciones difíciles, como la humedad o el polvo. Están disponibles para bases de caucho o acrílicas.
- Removibles: el pegamento ofrece una adhesión media, pero no deja residuos en la superficie. Se usan cuando es necesario retirar las etiquetas luego de un tiempo, sin dejar marcas.
Tipos de papel para decorar
Este papel suele tener diversos estampados, con distintos gramajes y propiedades particulares, aunque es común el uso del tipo offset y papel kraft. Igualmente, el papel crepé y el de seda, suelen ser utilizados en algunas decoraciones.
Lo más común es el uso de papel adhesivo con estampados, que viene en forma de cintas para decorar distintas superficies, como paredes de interiores o muebles. Asimismo, las cintas decorativas vienen con pegamento o se utilizan en la elaboración de lazos o para empaques de regalos.
Tipos de papel para diseño gráfico
Los diseñadores gráficos requieren papel de alta calidad, que le permita hacer impresiones en distintos formatos y diversos materiales. Estos profesionales toman en cuenta desde el gramaje, textura, revestimientos especiales, porosidad, resistencia y blancura, a fin de determinar el tipo de papel que mejor va a reflejar su trabajo.
Entre los tipos de papel más usados en el diseño gráfico, se encuentran los que se usan normalmente en impresión y con tratamientos especiales:
- Estucado: lleva capas de revestimiento que aumentan su suavidad, disminuyen la porosidad y tiene poca transparencia. Puede ser mate (más usado en impresiones fotográficas) o satinado.
- Sin estucar: es un papel con alta porosidad, disponible en gran diversidad de gramajes y formatos. Puede contener blanqueadores o ser tipo kraft y se utiliza para imprimir desde textos hasta publicidad.
- Gofrado: es un papel que ha sido sometido a presión para lograr una superficie con relieve y se utiliza frecuentemente para la impresión de logos o distintivos de empresas u otras instituciones.
- Adhesivo: es aquel que lleva una cara engomada y sirve para la impresión de diversas etiquetas que se colocan en distintas superficies.